Vuelta a la rutina

Bueno, este año me está costando bastante volver porque tengo una pereza que no os podéis imaginar. Lo que llevo de año ha sido bastante movidito (entre otras cosas por la mudanza que empecé a finales de la primavera y que me tuvo bastante entretenida hasta mediados de verano). Agosto, en cambio, fue un mes para descansar, desconectar y ordenar ideas. No he escrito ni una palabra, pero ni una sola, y es que con el calor que tenemos en estas zonas de España cuesta mucho. También me ha servido para recargar pilas y meditar mucho sobre todo en general. Este año espero poder sacar adelante mi cuarto proyecto literario que está aún en pleno proceso creativo y del que ya os iré hablando y del que publicaré algún avance para que os vayáis haciendo una idea.

Este curso quiero dedicar más tiempo a la escritura y también a la lectura, un placer que he ido dejando aparcado por tantas otras cosas y que para mí es un ingrediente vital para crecer como escritora.

Vamos a ver cómo se van dando las cosas en este nuevo curso, mientras tanto, retomaré las redes poco a poco, pero sobre todo me centraré en la escritura y en sacar adelante lo que tengo entre manos que, aunque parecía más fácil de lo que había hecho hasta ahora, no lo está siendo para nada. 

Volvemos a la carga, entonces. 

Gracias por leer.